Preparando una defensa de programación ganadora

La defensa de la programación es un evento que va más allá de la presentación de contenidos, en donde se pone a prueba la capacidad del opositor para comunicar de manera clara, persuasiva y fundamentada. Se trata de un momento crucial dentro del proceso de oposición, ya que el desempeño durante esta fase marcará la diferencia entre éxito y fracaso. 

En Escuela de Maestro sabemos que esto representa un gran desafío para los opositores y que representa un momento en el que los nervios, la expectación y el cansancio están a flor de piel. Es por ello que en este artículo vamos a exponer las claves que te ayudarán a prepararte para esta fase de la oposición y veremos las estrategias más efectivas para una defensa de la programación ganadora. 

Entendiendo la defensa de la programación

Cómo todos sabéis, la fase de la defensa de la programación consiste en exponer ante el tribunal una de las unidades didácticas de vuestra programación de aula. Para la defensa de la misma, dispondrás de un tiempo limitado y se permitirán el uso de material así como la propia programación de aula que hayáis presentando. 

Este sería el funcionamiento estándar de la fase de la defensa, la cuál puede variar en función de la comunidad autónoma en la que te presentes en cuanto a: número de bolas en el sorteo, tiempos, límites en el uso de algunos materiales, etc. 

Pero lo realmente fundamental es entender en qué se basa este proceso y qué espera el tribunal de ti. La defensa de la programación es la fase más personal de toda la oposición, es el momento en el tu trabajo deja de hablar por ti y pasas a ser tu, quien lleva la voz cantante. Es por ello, que la clave para el éxito no va a estar tanto en los materiales, sino en la calidad de tu defensa. El tribunal va a tener delante a una persona que aspira a ser docente y por tanto deben observar una serie de capacidades que garanticen que eres apto para dicha labor. Por lo tanto, es fundamental entender la importancia que tiene prepararse para esta prueba y dedicarle el tiempo adecuado para que nuestra defensa sea un éxito. 

Preparación

Una buena preparación será nuestra mayor arma para enfrentarnos al día de la defensa. Debes empezar a prepararlo todo para ese momento con suficiente antelación, puesto que una vez que empiece la vorágine del proceso de oposición, va a resultar muy complicado. Así que vamos a ver qué aspectos no debes perder de vista.

Práctica la exposición desde el principio

Durante todo el proceso de preparación tendrás numerosas oportunidades para desarrollar tu capacidad expositiva. En Escuela de Maestro, dejamos espacios dónde los opositores pueden participar exponiendo a lo largo de las sesiones. Creemos que esta práctica es muy beneficiosa de cara a la futura defensa de la programación. Bien es cierto que al principio puede costar bastante, la vergüenza y los nervios son el principal muro a la hora de participar en estas dinámicas. Sin embargo, la única manera de obtener confianza y desarrollar habilidades comunicativas es ponerlas en práctica en contextos que no te resulten cómodos.

Por otro lado, si te resulta muy complicado empezar de esta manera, un buen modo de empezar es también exponer en círculos pequeños de confianza para poco a poco ir aumentando la dificultad del público. Puedes por ejemplo, empezar a exponer con un familiar o amigo/a, luego ir aumentando el número de estos y de ahí pasar a exponer con un público de menor confianza. Te aseguro que el progreso será notable. 

Haz simulacros

A diferencia del punto anterior, el objetivo de realizar simulacros no es solamente mejorar las habilidades comunicativas. Realizar simulacros de situaciones reales te ayudará en gran medida a prepararte a nivel estratégico, táctico y psicológico. Estos aspectos son fundamentales para que el día de la defensa se minimice al máximo el margen de error.

El día de la prueba tendrás un tiempo limitado, tu puesta en escena debe estar perfectamente calculada y ensayada. Al igual que un buen actor, debes tener un guión que te ayude a organizar la secuencia de actos durante la exposición. El truco está en ensayar hasta que todo cuadre, asegurándote de que eres capaz de sacarle el máximo jugo a tu programación de aula durante el tiempo permitido.

¿Qué necesitas para empezar a realizar simulacros?

• Un guión: Puedes llevarlo contigo el día de la prueba siempre y cuando se respeten los límites establecidos en la convocatoria. Aún así, si te has preparado bien, solo te servirá en caso de emergencia ya que te lo sabrás de memoria. 
• La primera parte de la Programación de aula: Ten en cuenta que dispondrás, dependiendo de la comunidad autónoma, de alrededor de 1h para toda la defensa. Está se dividirá es dos partes, 30 minutos aproximados para la defensa de la programación de aula y otros 30 minutos para la situación de aprendizaje. ¡NO DEBES DECIRLO TODO!. La mejor opción es seleccionar la información necesaria para que el tribunal pueda imaginar el contexto donde se va a llevar a cabo la situación de aprendizaje y la información que asiente la bases pedagógicas en las que te bases como docente (metodologías, evaluación y atención a la inclusión).
• Una situación de aprendizaje completa: Con una unidad terminada ya puedes empezar a realizar simulacros, puesto que la tu defensa seguirá siempre la misma estructura, solo variará el contenido de la unidad y los materiales utilizados.

Estrategías para una defensa exitosa

Lo primordial para triunfar en la defensa de tu programación es que seas capaz de transmitirle al tribunal todo lo que deseas. Uno de los errores más frecuentes en las defensas es que los opositores empiezan a recitar de memoria un texto y a avasallar al tribunal con material. La buena defensa es aquella en la que somos capaces de hacer que el tribunal se sumerja en nuestra programación de aula. Deben poder visualizar nuestro grupo, nuestro centro, nuestra aula; deben entender qué metodología aplicamos y por qué lo hacemos; y deben de captar nuestro estilo pedagógico. En definitiva, todo esto se basa en conectar con el tribunal, ya que al fin y al cabo tú eres el orador y ellos son el público. 

Otro aspecto que debemos tener en cuenta es que hay miembros del tribunal que tal vez no conozcan las metodologías, el tipo de evaluación o las herramientas digitales que vayas a utilizar. Por ello, es fundamental que seas muy eficaz guiándolos para que no se pierdan durante tu exposición. 

A continuación comentaremos algunas estrategias efectivas que utilizamos en Escuela de Maestros: 

• Sigue una estructura: Tener una estructura de base te permitirá economizar mucho esfuerzo de memorización. Construye una buena estructura, elabora un guión y ensaya todo lo que puedas. 
• Sigue una secuencia lógica: Divide tu defensa en secciones claras y conectalas bien durante la exposición. El tribunal debe saber en qué sección está en cada momento y cómo se relaciona cada apartado con el siguiente. 
• Utiliza bien los anexos: En nuestra academia facilitamos a los opositores una serie de anexos que potenciarán mucho tu exposición durante la defensa. Los anexos deben ser efectivos y no solo “relleno”. El uso de los anexos adecuados ayudarán al tribunal a entender todo el trabajo que hay detrás de tu programación de aula. 
• Usa recursos visuales: La maquetación es uno de nuestros fuertes. Cualquier presentación que se precie debe combinar diferentes tipos de lenguajes. Utiliza materiales y organizadores gráficos que ayuden a condensar la información.